CLÍNICA JAVIER FDEZ. ULLOA.

Nuestro proyecto para la clínica oftalmológica es atípico ya que su estrategia difiere de la de otros proyectos de retail o contract que se desarrollan sobre espacios diáfanos y cuyo programa se resuelve prácticamente con el mobiliario que sirve para la exposición y venta de producto o específico para el trabajo que se realiza en estos. La clínica F. Ulloa se ubica en la antigua oficina y almacén de una empresa de transporte que se transforma completamente. Se requerían subespacios sanitarios muy especializados por lo que necesitamos una arquitectura interior compleja que quisimos resolver mediante volúmenes que conformasen llenos y vacíos aprovechando la altura total que disponía el contenedor, permitiéndonos jugar con la escala entre ellos y en el espacio.

El círculo es una geometría perfecta que se asocia a la ciencia y a sus principios universales y está muy vinculada al campo de la medicina que estudia el ojo, por otro lado, al romper la dictadura del plano, se producen espacios en los que el empleo de geometrías concéntricas resulta muy singular. Así en los inicios del proyecto partimos de la construcción de espacios interiores en los que la geometría del círculo tuviese un papel relevante.

El ensanche de Vigo constituye un patrimonio arquitectónico de inestimable valor no solo por la importancia de algunas edificaciones sino y sobre todo en relación al conjunto, con más de 400 inmuebles catalogados.
Las necesarias actuaciones de rehabilitación y reforma interior deben partir de la premisa de poner en valor el patrimonio arquitectónico de la
ciudad. Sobre la fachada del edificio, con un nivel de catalogación ambiental, se llevó a cabo una limpieza y una substitución de las anteriores carpinterías de aluminio.

Procuramos enfatizar la proporción vertical de los huecos existentes con una nueva carpintería de acero y vidrio y empleamos prismas de vidrio circulares translúcidos insertos en los huecos para generar niveles de privacidad en los ámbitos de atención al público y espera detrás de la fachada principal y acceso, de forma que pudiese entrar la mayor cantidad de luz natural desde el exterior; utilizamos estos elementos a una escala mayor en el interior del local que extrusionamos para crear subespacios interiores que sirven de gabinetes oftalmológicos, los espacios que se generan entre sí, resuelven una parte del programa y la circulación. Los gabinetes oftalmológicos miran desde el interior del local hacia la fachada a través de los prismas circulares para permitir el paso de la luz natural de forma que logramos ganar espacios alimentados de la luz disponible, no solo la diurna sino aprovechando también la iluminación artificial de las zonas comunes de la clínica. Situados sobre las medianeras y con un eje de circulación principal central, las instalaciones que sirven a los subespacios abovedados se desarrollan a traves de un trasdosado técnico.